Harper Thornhill, conocida profesionalmente como la Condesa Diamond, gana seis dígitos como dominatriz financiera. Se trata de una de las múltiples modalidades del BDSM; cuenta con esclavos financieros, empresarios o líderes de empresas que sienten placer al entregar su dinero y llegan a ceder hasta el control total de su patrimonio.
No es un mito, existe. Hay diversas formas de practicarlo: algunas relaciones de dominación financiera (o findom) consisten en pagos puntuales, otras son transferencias regulares de dinero y algunos hombres incluso entregan las contraseñas y el control total de sus cuentas bancarias a una dominatriz, pidiéndo también que diseñe un presupuesto mínimo para él.
Para los paypigs, ‘cerdos pagadores’, como se le conoce a los hombres que practican esta forma de sumisión, la excitación proviene de la idea de que alguien invada el propio espacio económico.
Muchas veces, el dominante y el sumiso solo se relacionan a través de internet, en web y foros. La dominatriz usa frases llenas de erotismo para que le sean entregadas las cuentas financieras y tome el control de los gastos.
¿Qué hace Diamond?
Harper Thornhill originaria de Bristol (Inglaterra), de 35 años, casada y madre de dos hijos, aspira a llegar a la máxima expresión de este tipo de fetiches, un control financiero total.
Diamond asegura que trabaja para mejorar la situación financiera de sus sumisos. Así es como gana seis cifras.
En cuanto al trato que otorga, destaca que es el mismo lenguaje que se usa para tratar con los sumisos sexuales.
«Cuando veo que necesitan ahorrar, les limito los gastos. Si gastan una cantidad estúpida de dinero en ir al trabajo, les ordeno que caminen la mitad del trayecto. A la gente le excita la idea de entregar todo lo que tienen sabiendo que me voy a llevar una buena parte», dijo a FunFactory.
Puedes ver parte de la entrevista de la dominatriz en este enlace.
Continúa leyendo…
http://localhost/wordpress//news/mia-nix-primera-colombiana-galardonada-en-los-premios-avn/
